¡Importancia de la diversión en tiempos de vacaciones!

Tener vacaciones no es sinónimo de no hacer nada, más bien es, un tiempo para cambiar de actividades, ojalá a unas placenteras y alegres.Preparar los días de descanso puede ser un motivo de mucha felicidad para la familia, hay estudios que demuestran claramente que las personas gozan más en la preparación y en la planeación que en las propias vacaciones.

Es importante volverlas una experiencia en la que se involucre a toda la familia, buscar los sitios, revisar las posibilidades, escoger alguno y alistar las potenciales actividades, los padres deben estar dispuestos a enfrentar un cambio en las rutinas y todos deben gozarse esta fase inicial. Ojalá todo el mundo pueda dejar sus celulares lejos para dedicarse en cuerpo y alma a pasar un tiempo de calidad con la familia, los más rebeldes son los adolescentes, que quieren seguir pegados a sus juguetes tecnológicos y a sus amigos, poco a poco ellos se integran, y más si han sido parte de los organizadores.

Las vacaciones son memorias de momentos felices que van quedando en el inconsciente de las familias, todos nos acordamos de los descansos donde los abuelos, con primos, con tíos, etc. Si no se puede ir en familia porque el papá y la mamá tienen que trabajar, preparen con sus hijos algo especial, ya sea unas clases de sus deportes favoritos, un campo de verano o una ida a visitar parientes en otra ciudad o, mejor aún, en el campo.

El cuerpo y la mente necesitan un cambio para volver con fuerzas renovadas al siguiente año escolar, es una linda oportunidad que todos deben aprovechar, desafortunadamente, para muchos adultos el hecho de que los niños queden desocupados es motivo de preocupación y angustia. Esto no debe ser así si ustedes,  papás, se organizan bien y logran que su hijo, aunque no cambie de lugar, tenga otras rutinas, que pueden ser clases de diferentes temas, deportes, visitas con los amigos, etc. También es provechoso que nuestros hijos aprendan a manejar el tiempo de ocio, que se vean obligados a entretenerse con algo y lleguen a ser muy creativos en este proceso.

Lo que no se puede permitir es que se queden acostados frente a la televisión todo el día o jugando pasivamente en internet, Al no permitir esta pasividad, los padres le hacen un gran favor a sus hijos, quienes buscarán otras maneras de pasar el tiempo. No hay que estructurar todo lo que hacen los hijos; el tiempo libre y no estructurado es igual de importante para un buen desarrollo, dejar volar la imaginación y ‘echar globos’ también hace falta, obviamente, bajo la supervisión de adultos.

Con los niños muy pequeños y los bebés a bordo por primera vez, las vacaciones pueden ser difíciles, el cambio de rutina y de lugar pueden afectar negativamente a los más pequeños, esto sumado al cambio de comida y clima, les puede producir una baja de defensas y se pueden enfermar, por esta razón es bueno llevarles ciertas comidas y juguetes conocidos para que no extrañen tanto, con estos niños también es bueno tratar de respetar las rutinas, pero de manera más flexible.

La posibilidad de ir en compañía de otras parejas que tengan hijos de la misma edad puede ayudar mucho a que todos estén en el mismo plan y sean, por lo tanto, más tolerantes, independientemente de todo esto no se deben desaprovechar las vacaciones. Todos necesitamos el cambio de panorama y también nos sirve para aprender a convivir de manera agradable en diferentes situaciones.

¡Tenga expectativas realistas, pero trate de gozar lo más que pueda!

Poner distancia del trabajo y del colegio es necesario, para así llegar renovados a continuar.

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Imagen extraída de: Google.

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